La
jefatura de la policía de Chile sancionó a cuatro carabineros por haber
faltado a los protocolos de detención y obligado a desnudarse a alumnos
de nivel secundario durante un desalojo de un colegio que estaba tomado
por los estudiantes.
El 13 de agosto, miembros de los
Carabineros de Chile (policía) llegaron al liceo María Luisa Bombal de
la ciudad de Rancagua, 85 kilómetros al sur de la capital Santiago, para
desalojar el colegio que había sido tomado durante un paro nacional
convocado por los estudiantes secundarios y universitarios.
Según los estudiantes afectados, entre
los cuales hay siete hombres y tres mujeres, durante su detención fueron
obligados a desnudarse y hacer ejercicios forzados mientras pasaron
varias horas detenidos, contrario a los protocolos de detención de la
policía.
El general Gustavo González, director de
los Carabineros, dijo que se realizó una investigación "y hay una
responsabilidad directa de los carabineros que operaron en el lugar en
un procedimiento de desalojo”, según cita la agencia EFE, quien dijo que
el operativo no estuvo “acorde al protocolo que corresponde”.
Líderes estudiantiles y afectados
presentaron una denuncia por el abuso ante el Instituto Nacional de
Derechos Humanos (INDH) del país, en la que señalaron detenciones
violentas, agresiones con balas de goma, y las órdenes de desnudarse y
hacer ejercicios “no señalados por la ley”, explicó Gabriel González,
presidente de la Confederación de Alumnos.
“Fuimos esposados en todo momento,
fuimos desnudados en la comisaría y fuimos a hacer sentadillas”,
denunció frente a la prensa Ignacio Muñoz, alumno del liceo María Luisa
Bombal, reportó CNN Chile.
La INDH recibió la denuncia de “ocho
casos de abusos con connotación sexual en las comunas de Rancagua, San
Miguel, Santiago Centro y Puente Alto”, informó la directora del órgano
de derechos humanos chileno, Lorena Fries. Sin embargo, el general
González dijo que sólo fue un caso que afectó a un menor de edad, según
el reporte que obtuvo del incidente.
"Yo estuve con los menores involucrados,
ellos no tienen absolutamente nada en contra del procedimiento en sí,
que no sea esta particular situación que afectó a uno de los menores de
edad masculinos”, dijo
Un video grabado con un teléfono móvil,
obtenido por CNNChile, muestra cómo un carabinero introduce su mano a la
parte trasera del pantalón de una joven al momento de ser detenida. Y
en otro se aprecia que varios policías lanzan patadas a los estudiantes
cuando son detenidos en un liceo.
Los señalamientos han generado críticas
sobre la actuación que han tenido en las protestas de los estudiantes de
las últimas semanas, quienes en varias ocasiones se han enfrentado
violentamente con la policía en sus manifestaciones por mejoras al
sistema educativo.
El expresidente chileno Ricardo Lagos
dijo que “sería absolutamente contradictorio con las normas de un país
democrático que ocurrieran hechos como los que se han denunciado, no
tienen justificación”, informó CNNChile.
A su vez, el diputado Felipe Herboe,
quien fue subsecreario del Interior bajo la presidencia de Michelle
Bachelet y Ricardo Lagos, consideró a este como un hecho “inaceptable”,
aunque confió en que el general González aplique las sanciones
necesarias, dijo en una entrevista con CNNChile.
“El gobierno debería de revisar también
los protocolos de conversación. Creo yo que ha habido falta de capacidad
de diálogo, en este caso en el conflicto estudiantil, y canalizar las
inquietudes”, agregó.
Los estudiantes secundarios y
universitarios en Chile han efectuado varias concentraciones y toma de
colegios en su búsqueda de que el gobierno responda a las demandas que
han planteado, como la centralización de la educación, democratización
de los órganos de dirección de los colegios y eliminar el lucro de la
educación privada.
El gobierno ha respondido a las demandas
con el aumento de becas para los estudiantes y un paquete de reformas
para el Congreso que buscan fondear la educación, medidas que mantienen
el descontento de los estudiantes.
La expulsión se suma a la sanción
que recibieron un oficial y tres suboficiales de Carabineros que
obligaron a desnudarse a unos alumnos de secundaria tras haber sido
arrestados en el marco de las protestas estudiantiles.
En el video
realizado por un obrero se ve a un grupo de manifestantes que se
refugia en un edificio en construcción situado a pocos metros del centro
de Santiago. Posteriormente ingresan unos tres policías que atacan con
patadas en la cabeza a un manifestante en el violento desalojo.
El
jefe de la prefectura central de Carabineros, coronel Víctor Tapia dijo
a los periodistas que se pudo establecer la identidad de un funcionario
que citado a presencia reconoció su participación en un hecho que se
aparta absolutamente de los lineamientos de la institución.
“De
forma inmediata fue desvinculado de la institución, este miércoles a las
20.00 horas (00.00 GMT del jueves). Aparte de eso se ordenó la
instrucción de un sumario para poder establecer eventuales
responsabilidades respecto de otro personal”, informó Tapia.
En
tanto, el general director de Carabineros, Gustavo González, afirmó que
se van a hacer todos los esfuerzos necesarios para que este tipo de
hechos no se vuelvan a repetir.
“Que haya un mayor control, una
mayor capacitación de nuestro personal. Ahora bien, yo no puedo asegurar
que ningún hecho va a volver a ocurrir. Eso no es posible en una
institución tan grande como la nuestra de casi 50 mil carabineros”,
añadió.
La marcha del pasado martes reunió a 180.000 estudiantes,
según los convocantes, y terminó con incidentes aislados protagonizados
por encapuchados que se enfrentaron a la policía y destruyeron
mobiliario público y privado.
Los estudiantes piden desde mediados
del año pasado por una educación pública, gratuita y administrada en el
nivel básico y secundario por el Gobierno central y no por los
municipios, como ocurre en la actualidad.
A nivel universitario
buscan el fin del lucro existente en muchos centros privados y de los
altos costes de las carreras, que deben solventar con créditos del
sistema financiero.
El Gobierno ha respondido con ofertas de
créditos más baratos, más becas y una reforma tributaria que se debate
en el Congreso, que busca recaudar hasta 1.000 millones de dólares para
la educación, pero se niega a los cambios estructurales del sistema que
exigen los estudiantes.
En el marco de la movilización
estudiantil, los jóvenes se han tomado varios recintos educativos que
han sido desalojados por la policía, pero horas después vueltos a ocupar
por los estudiantes.
Asimismo, y con el apoyo de organizaciones
sociales y el Colegio de Profesores, a partir del segundo semestre han
realizado varias marchas en Santiago y otras ciudades del país.
En
los últimos días han sido varias las denuncias en contra de la policía,
ya sea a través de video y fotografías, en las que se acusa de
violencia desmedida de los carabineros en las marchas y en los desalojos
de los establecimientos educacionales.